Todo
ordenador funciona, desde un punto de vista llamado externo, con un esquema
similar y muy simple a través de los periféricos de entrada (teclado, ratón, micrófono...)
se introducen datos. Estos pasan a guardarse en los dispositivos
correspondientes (memorias) y se incorporan a la unidad central donde se
procesan. El resultado de tal procesamiento se envía a los periféricos de
salida (monitor, impresora...) dando lugar a la salida de datos.
Internamente,
la transferencia de los datos desde los dispositivos de entrada llega a la
unidad central de proceso a través de los denominados bases de datos. En el CPU
se procesan y siguen el camino inverso al recorrido anteriormente: se guardan
en la memoria y restantes unidades de almacenamiento y salen mediante los
dispositivos de salida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario